COB se declara en emergencia y prepara una marcha contra el nuevo gobierno
El primer ampliado nacional de la remozada Central Obrera Boliviana (COB) aprobó una resolución que incluye la declaratoria permanente en emergencia y la convocatoria a una marcha de protesta contra el nuevo gobierno, aunque no fue fijada la fecha de esa protesta.
“Se declara estado de emergencia permanente para proteger los derechos laborales y las conquistas ganadas por los trabajadores; también se ha convocado a una marcha que se debe definir la fecha; la COB no va a aceptar la privatización de la educación y no se puede quitar la subvención de los carburantes”, dijo el nuevo secretario ejecutivo del ente matriz, Mario Argollo.
El pasado 10 de octubre, los trabajadores realizaron su congreso nacional en la ciudad de Cobija. Allá eligieron a su nuevo Ejecutivo y también aprobaron la convocatoria a un ampliado que defina las reglas para encarar al nuevo Gobierno. La COB fue parte de la estructura gubernamental durante los 20 años del MAS en sus dos gobiernos a los cuales apoyaron sin condiciones.
“No hemos tenido convocatoria, pero, vamos a trabajar, no somos exigentes, somos propositivos también a las propuestas que nos hagan, nosotros como Central Obrera Boliviana vamos a tener nuestra posición, no estamos aquí para ser intransigentes, vamos a dar nuestras propuestas (al nuevo gobierno), nuestro pliego petitorio”, dijo Argollo sobre una eventual reunión con el presidente electo, Rodrigo Paz Pereira.
Aunque Rodrigo Paz y su equipo económico ya declararon que no quitarán la subvención de combustibles al transporte público, los cobistas advirtieron que lucharán por mantener el precio subvencionado de los carburantes y recordaron el caso ecuatoriano donde ya existe una protesta de dos meses que no deja en paz al Gobierno luego de haber quitado la subvención de los combustibles.
En Bolivia tampoco funcionó la supresión de esta subvención. En los mejores años del gobierno de Evo Morales, en 2011, el Gobierno intentó quitar este beneficio y lo hizo en Navidad, pero su medida no aguantó una semana de protestas y tuvo que quitar el decreto que anulaba el precio diferenciado.

