Piedras, petardos y heridos: la violencia empañó el fútbol en Montero
La violencia volvió a manchar una jornada de fútbol en Montero. Luego del empate 1-1 entre Guabirá y Blooming, por la fecha 9 de la Copa Bolivia, grupos de barras bravas de ambos equipos protagonizaron enfrentamientos en las inmediaciones del estadio Gilberto Parada, poniendo en riesgo la seguridad de los asistentes y vecinos del lugar.
El encuentro, que había transcurrido sin mayores sobresaltos dentro del campo, terminó con goles de Gastón Rodríguez para el cuadro azucarero y de Moisés Villarroel para la academia cruceña. Sin embargo, una vez finalizado el compromiso, la tensión se trasladó a las calles cercanas, donde comenzaron los disturbios.
Según los primeros reportes, se lanzaron piedras, petardos y otros objetos contundentes, mientras la policía tardó en intervenir. Testigos relataron momentos de pánico entre los hinchas y transeúntes que intentaban alejarse del lugar. Se confirmó que varios heridos fueron atendidos por personal médico y trasladados en ambulancia a centros de salud de la zona.
Además, una movilidad estacionada en las afueras del estadio fue apedreada. El vehículo sufrió la rotura del parabrisas y el robo de objetos personales de su interior. Las autoridades aún no han emitido un informe oficial sobre los daños ni sobre posibles detenidos.
La Federación Boliviana de Fútbol y los clubes involucrados podrían pronunciarse en las próximas horas. Lo ocurrido vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de reforzar los operativos de seguridad en los estadios del país y en sus alrededores, especialmente en torneos donde la rivalidad entre hinchadas suele escalar fuera del control.

