La ejecución presupuestaria general no llegó ni al 40% en los primeros 7 meses del año
Ya en el segundo semestre del año, el presupuesto agregado para el 2025, ajustado a Bs 457.651 millones tras un incremento sobre el monto inicial de Bs 369.340 millones, registra una ejecución del 37,94% (Bs 173.626 millones) al 31 de julio, según datos oficiales. Expertos señalan que este nivel, significativamente por debajo del 50% esperado para esa etapa del año, revela una combinación de falta de liquidez, ineficiencias administrativas y una priorización del gasto corriente sobre la inversión pública.
“A siete meses del año, la ejecución presupuestaria debería estar al menos por la mitad, deberían estar entre el 50 y 55% de ejecución, pero está en el 37,9%. Esto implica que sólo se ha hecho un gasto administrativo, si uno compara esta ejecución con la ejecución del presupuesto de inversión pública, que a julio llega apenas al 20%, entonces implica que lo que se ha ejecutado a julio solamente es gasto administrativo, todo lo que son pago de sueldos y pago de algunas deudas”, indicó el especialista en análisis presupuestario, Julio Linares.
Entre enero y julio de este año, la ejecución de la inversión pública en el país alcanzó apenas los Bs 6.440 millones, lo que representa el 22,9% del presupuesto total de Bs 28.047 millones, según datos del Ministerio de Planificación. Este presupuesto corresponde a los recursos destinados por el Estado para financiar obras y proyectos de desarrollo como carreteras, hospitales, sistemas de riego o infraestructura educativa, que buscan impulsar la economía y mejorar la calidad de vida de la población.
Por su parte, el economista Fernando Romero señaló que el nivel de ejecución hasta julio implica un retraso significativo en la gestión presupuestaria. Explicó que una ejecución inferior al 40% evidencia una baja capacidad de gestión, lentitud en los procesos administrativos y posibles restricciones de liquidez.
“El Presupuesto General del Estado 2025 refleja un estado con fuerte planificación pero débil capacidad de ejecución, condicionado por falta de liquidez, excesiva burocracia y empresas estatales poco eficientes, además de un escenario político no muy positivo, ni tampoco constructivo. Si no se corrigen esos problemas, el déficit fiscal, la deuda y el estancamiento económico se profundizarán en el corto y mediano plazo”, apuntó Romero.
Ambos expertos advierten que el país podría cerrar el año con una de las ejecuciones presupuestarias más bajas del actual gobierno, en medio de una crisis de liquidez y un fuerte endeudamiento interno que limita la capacidad del Estado para dinamizar la economía.
“Creo que lo que ha hecho el gobierno para financiar todo este movimiento de más de 580 instituciones públicas, es generar mucha deuda interna, porque los recursos tributarios o por hidrocarburos ya no alcanzan para nada. Lastimosamente esto va a parar y va a ser parte de la desaceleración de la economía y eso es a lo que vamos a llegar con una muy baja ejecución del presupuesto, yo creo que va a ser el más bajo de los cinco años de gobierno de Luis Arce y seguramente también de los gobiernos subnacionales en nuestro país”, manifestó Linares
Romero alertó que el cierre del año podría venir acompañado de un gasto apresurado y de baja calidad. “Esto puede traer obras mal planificadas, mal ejecutadas o sin impacto social, aumento de corrupción o sobreprecios para aplicaciones rápidas, y presión inflacionaria temporal, además de la que ya se genera por el mercado interno, si se inyecta mucho dinero de golpe y eso es peligroso considerando que va a haber cambios del gobierno”, subrayó.
En el Ejecutivo central
Con un presupuesto de Bs 25.294.584.416,47 (6,85% del total), los 17 ministerios y la Vicepresidencia promedian una ejecución del 38,09% (Bs 9.635.614.696,76). Solo dos ministerios destacan con una ejecución presupuestaria por encima del 50%: Educación con 53,18%, de un presupuesto de Bs 359.504.922, y de Salud y Deportes con 50,98% cuyo presupuesto total es de Bs 5.116.206.994, aunque este último enfrenta una deuda flotante del 20,41% (Bs 532.427.262,24), que refleja compromisos financieros pendientes.
En contraste, el Ministerio de Minería y Metalurgia registra un crítico 1,06%, solo ejecutó Bs 11.282.543 de Bs 1.064.608.161 inscritos en su presupuesto, seguido por Economía y Finanzas Públicas (13,60%), Culturas (20,85%), Obras Públicas (24,65%) y Medio Ambiente y Agua (24,81%).
“Ya entrado al segundo semestre una ejecución menor al 25%, es preocupante. La minería es uno de los proyectos estratégicos para generar divisas, que ha superado en los últimos años incluso a las exportaciones del sector hidrocarburifero. Una ejecución de apenas 1% indica parálisis institucional, falta de proyectos efectivos y débil gestión de inversión pública”, subrayó Romero.

